La capital de la moda italiana, Milán, acogió durante la Semana de la Moda la primera exposición monográfica dedicada a Cristóbal Balenciaga en este país. Un homenaje a un «genio atemporal» de la Alta Costura del siglo XX para conmemorar el 130 aniversario de su nacimiento, pero con la mirada puesta en el futuro. La muestra no busca evocar las décadas en las que Balenciaga marcó su huella, sino presentar la «esencia» de sus diseños, que siguen siendo relevantes hoy en día. Balenciaga decía que no había que buscar la fama sino el prestigio. una frase que lo dice todo de su forma de ser y de su obra.
Milan, Italy

“El único de nosotros que es un verdadero modisto”, dijo Coco Chanel de Balenciaga, ya que dominaba el arte de imaginar, diseñar, dibujar, cortar y coser una pieza de principio a fin.
La muestra, «Cristóbal Balenciaga | Shoes from Spain Tribute»
Ubicada en el prestigioso Palacio Morando milanés, se centra en las piezas más atemporales del creador español, con un recorrido que incluye 25 modelos de Balenciaga, «acompañados» de zapatos diseñados exclusivamente para el evento por 25 de las mejores marcas de calzado de España“. La exposición, promovida por la Federación de Industrias del Calzado Español (FICE), con el apoyo de ICEX y la Embajada de España en Italia, entre otros principales sponsors, ha coincidido con Milano Fashion Week, Micam, la feria internacional más importante del calzado, además de Mipel y otras ferias vinculadas a la moda. Un aspecto fundamental de la muestra ha sido la colaboración entre marcas de calzado españolas y los mejores artesanos del país, quienes han diseñado zapatos exclusivos para acompañar las prendas de archivo. Para Javier Echeverría, comisario de la exposición, la relevancia del maestro Balenciaga no ha disminuido con el paso de los años y, parafraseando a Sonsoles Diez de Rivera, la persona que más ha hecho por la conservación y difusión de su obra: “Balenciaga es sinónimo de elegancia, de exquisitez, y del buen gusto a un nivel que nadie ha logrado equiparar”.
Con esta exposición, las empresas del calzado han querido rendir homenaje a Cristóbal Balenciaga y complementan sus vestidos con propuestas de calzado contemporáneo, seleccionadas mediante concurso, al que cada firma podía presentar tres diseños. De este modo, las creaciones de Balenciaga se han combinado con calzado actual en un ‘total look’, con zapatos contemporáneos, lo que permite observar cómo las atemporales piezas de archivo se adaptan a la moda de 2025, afirma Echeverría.

Javier Echeverría Sola comisario de”Cristóbal Balenciaga Shoes From Spain Tribute”.
Un innovador en discurso curatorial del estilista vasco.
Cristóbal Balenciaga, atemporal
La atemporalidad del legado del español Cristóbal Balenciaga y su reconocimiento como maestro, vuelve a estar de actualidad, ya que por primera vez se celebra una exposición monográfica sobre su obra en la capital de la moda italiana, Milán. Javier Echeverría, afirma que, la elección de los 25 vestidos, que forman parte de la exposición fue minuciosa y buscando la “espectacularidad de los diseños y su atemporalidad”.

Para Christian Dior, Balenciaga era el mejor modista del mundo.
“Nosotros hacemos los que podemos con los tejidos, Balenciaga hace lo que quiere”.
Esta muestra no ha querido solo recordar a Balenciaga, sino presentarlo como «un visionario cuyo trabajo sigue vivo», más allá de su auge en los años 40, 50 y 60 del siglo pasado. Este innovador discurso curatorial busca romper con la tradicional visión retrospectiva del modisto, centrada en su inspiración, en la vestimenta tradicional, en las mujeres que vistieron sus creaciones… enfoques perfectos pero que siempre miraban hacia el pasado, para presentar esta vez a Balenciaga desde los ojos de hoy y mirando hacia el futuro.
Esta exposición quiere hablar de la vigencia de su obra, del impacto que sus creaciones siguen teniendo en la moda actual. “Ahora las marcas cambian totalmente de una temporada a otra, pero el maestro de Getaria tenía una forma de trabajar basada en la evolución constante», explica el comisario, «No rompía con todo para empezar de nuevo como se hace hoy, todo tenía un sentido, y eso hace única la línea Balenciaga”.

El icónico vestido de novia de Sonsoles Diez de Rivera y de Icaza. Una auténtica joya creada de las manos del propio Cristóbal Balenciaga bordado entero en hilo de plata.
Piezas icónicas
Su amigo y proveedor de tejidos, Gustav Zumsteg, organizó la primera exposicióndedicada a Balenciaga en Zurich en 1970, tres años después Diana Vreeland comisarió su primera exposición en Estados Unidos, inaugurando lo que hoy se conoce como la Met Gala, y en 1974 llegó la primera retrospectiva a España, sin embargo, Italia, ha esperado hasta 2025 para admirar su maestría. Un aspecto clave a la hora de enfrentarse a esta exposición con el gran respeto y admiración por su obra con el que se ha hecho, presentando 25 piezas icónicas de la “línea Balenciaga”.

Evolución a lo largo de los años de Balenciaga, a la izquierda la capa color frambuesa que lució doña Letizia para la muestra fotográfica de Leibovitz.
Cristóbal Balenciaga (1895- 1972), considerado como el maestro de la Alta Costura, abrió su primer taller en San Sebastián en 1917, a los que se sucedieron sus casas de Madrid y Barcelona, antes de abrir su cuarta sede en París en 1937. Tuvo entre sus clientas a algunas de las mujeres más importantes y más ricas de su época, como la Reina Fabiola de Bélgica, la princesa Grace Kelly de Mónaco, la marquesa de Llanzol, la condesa Mona Von Bismarck, la millonaria Barbara Hutton o actrices como Marlene Dietrich y Greta Garbo.
Recientemente ha vestido a Su Majestad la reina Letizia, para su sesión con la fotógrafa Annie Leibovitz, luciendo una capa color frambuesa de 1962 que se ha vuelto a ver en Milán y que pertenece a la Fundación Antoni de Montpalau, que también ha prestado para esta ocasión otras siete piezas. Así mismo han formado parte de la exposición el Museo Cristóbal Balenciaga de Getaria, el Museo del Traje de Madrid, el Museu del Disseny de Barcelona y distintas colecciones privadas como la de Sonsoles Diez de Rivera, Alventosa Talamantes, Teresa Berganza, Swarovski Heritage Collection, Tere Garasa y López-Trabado.

El color negro se encuentra en el corazón del tejido narrativo de su poética.
El taller de fantasía
Además de su atemporalidad, la exposición muestra la espectacularidad de sus piezas y para ellos se centra en lo que en costura se conoce como taller de fantasía o “flou”, esdecir los vestidos de cocktail y noche más espectaculares, explica Echeverría, aquellas piezas donde Balenciaga podía dar rienda suelta a su creatividad. La muestra no busca evocar las décadas en las que Balenciaga marcó su huella, sino presentar la «esencia» de sus diseños, que siguen siendo relevantes hoy en día.

1963. Colección Sonsoles Díez de Rivera y de Icaza.
Vestido de noche en gros de Nápoles fucsia con efecto moaré.
Un Balenciaga eterno, que combinado con un precioso zapato actual conformaría un total look. “Cada vez que vemos un vestido más corto por delante que por detrás, eso es el corte ‘pavo real’, que Balenciaga presentó en 1957, antes de que nadie lo hiciera. Las faldas globo, el vestido saco, la chaqueta semi-entallada… Muchas de las cosas que hoy consideramos innovadoras o actuales, Balenciaga ya las había creado”, afirma Echeverría. La selección de las piezas fue un desafío, dado que su obra abarca más de 50 años de carrera y su vasto legado ha tenido que adaptarse a las limitaciones de espacio en el Palazzo Morando.
Una exposición única donde se muestran 25 piezas muyrepresentativas de sus colecciones de cocktail y de noche, así como el icónico vestido de novia de Sonsoles Diez de Rivera. Para el comisario este espectacular vestido nupcial sería el más Balenciaga y su preferido de toda la exposición.
Info: Palazzo Morando
Créditos fotográficos: Juan Carlos Vega