
MONDRIAN, PIONERO DEL ARTE ABSTRACTO

PIET MONDRIAN. DE LA FIGURACIÓN A LA ABSTRACCIÓN, EN EL MUDEC MILÁN HASTA EL 27 DE MARZO.
UN FABULOSO RECORRIDO POR LAS DISTINTAS ETAPAS DEL PINTOR NEERLANDÉS, QUE EXPERIMENTÓ CON TÉCNICAS DIVERSAS, ARRIESGÁNDOSE, HASTA ENCONTRAR SU SUEÑO DE ABSTRACTA PUREZA.
Myriam Lafuente Soler, giornalista spagnola (di Alicante), collabora per Agenda Viaggi scrivendo in spagnolo e inglese. Ci racconterà con i suoi articoli, le sue emozioni e i suoi punti vista. Una scelta inedita, che aggiunge un tocco internazionale al nostro magazine online.

Milan, Italy.
Mondrian, de la tradición del paisaje holandés a la historia del arte moderno. Una exposición excelentemente montada en la que se ofrece al espectador la posibilidad de ver obras de un Mondrian menos conocido que pintaba a plein air en los campos holandeses y que acaba produciendo arte al son de la música de jazz en NYC, alcanzando la fama mundial. Comisionada por Daniel Koep (Head of Exhibition) y y Doede Harderman (Head of Collection) nos da un marco cultural, para entender al artista, El arte se dirige a los ojos y la sensibilidad como lo hace del mismo modo a la inteligencia y el conocimiento.
Nació en Amsterdam en 1872 en el seno de una familia protestante. Pegado a la tradición y enraizado en la escuela holandesa paisajística con influencia romántica, sus primeras obras son de representación expresionista del paisaje holandés de la Escuela de la Haya: molinos de viento, ríos, paisajes bucólicos son el motivo principal de sus cuadros. “He comenzado a pintar muy pronto. Mis primeros maestros han sido mi padre, que pintaba por hobby y mi tío que era un profesional. Prefería pintar paisajes y casas con el cielo cubierto o con la luz fuerte del sol cuando la densidad de la atmósfera oscurece los detalles y acentúa los perfiles de los objetos. Muchas veces he diseñado al claro de luna las vacas que reposaban o estaban inmóviles en las praderas holandesas” (Piet Mondrian).
En esa primera etapa la figuración existe pero se puede percibir cómo el artista llevaba dentro un ansia de ir a otros confines. Una exposición interesantísima en la que se van recorriendo con la mirada los estilos y técnicas con las experimentó a lo largo de carrera. Si pintaba en el lienzo flores, no le gustaba pintar un ramo sino una sola flor a la vez para poder expresar mejor la estructura plástica. Ahí se evidencia su futura evolución porque para Piet Mondrian no es importante el tema sino la búsqueda de nuevas formas expresivas.
La muestra sigue un hilo lógico y considera todo el trabajo del artista como una unidad con una evolución propia. Del realismo figurativo al realismo abstracto. Nos adentramos en un universo complejo de un genio quien se ha inspirado más por la belleza de las líneas y el color y las relaciones entre ellos que por el tema concreto de la imagen. Se descubre al público en esta magnifica exposición que, la innovación, parte de la tradición, que lo nuevo ahonda sus raíces en el pasado. Las obras siguen un orden en las salas del museo que lleva a entender el cambio paulatino que experimenta su arte.
En 1911 hasta 1914 realiza en su primera estancia en París. Conoció a Picasso y al ver sus obras tuvo el estímulo de comenzar una progresiva abstracción de la realidad visible. A partir de ahí su obra se va haciendo más extrema, experimentando con estilos diversos el postimpresionismos, iluminismo, simbolismo, fauvismo puntillismo, cubismo… que supera la pintura tradicional donde se había formado.
Volvió a Amsterdam. Junto a Theo van Doesburg funda la revista De Stijl en 1917 donde adhieren los pintores abstractos del momento. Rechazaban cualidades sensoriales, de textura, superficie y color, eliminar curvas y las formas. Empieza poco a poco a pintar con estilo único que le hace inconfundible. Líneas rectas y colores primarios, contraste de formas rectangulares. Con esta corriente propuesta en 1920, el neoplasticismo, quiere llegar a la esencia del lenguaje plástico reduciéndola a líneas geométricas y colores puros hasta hacerla universal. Un arte sin elementos accesorios, solo lo elemental, elevando la concepción de lo abstracto a su máxima expresión. Preferencia por la línea recta siendo el rectángulo la forma básica que aparece en casi todos los cuadros de esta etapa.
Empleo de colores primarios o neutros, un numero limitado de tonalidades disonantes entre sí. “El color es mi obsesión de todo el día, mi alegría y mi tormento”, expresó el pintor, y tanto era así que llegó a la excentricidad de no tener nada de color verde en su casa. Conseguir un lenguaje universal plastico y objetivo era deseaba lograr con su arte. En la muestra del MUDEC podemos contemplar mobiliario realizado por artistas de este movimiento. El legado más grande está en el diseño debido a su técnica se pudieron diseñar objetos de interior, moda, arquitectura y diseño gráfico industrial.
Para Mondrian debía haber una ausencia de trazos diagonales y curvilíneos reduciendo las formas a una geometría simple ahí radia la belleza. Cuando Droesgurg introduce la línea diagonal, rompe con él pues para Mondrian era un retorno al estilo personal. La realidad de las cosas más allá de sus aspectos mutables: “Antiguamente donde uno vivía más en contacto con la naturaleza, la abstracción era fácil, hecha inconscientemente. Ahora, en nuestra desnaturalizada edad, la abstracción se convierte en un esfuerzo”.
Realizó estudios espirituales y filosóficos, era teosofico un movimiento que buscaba el conocimiento de la naturaleza más profundo que el proporcionado unicamente por los métodos empíricos. “Solo cuando estemos en lo real absoluto el arte no será ya necesario”. El arte no debe ser figurativo ni reproducir objetos aparentemente reales, el arte debe ser una indagación de lo absoluto subyacente tras la realidad fenoménica. El arte puro despojado de lo particular y el proposito no era crear otras formas y colores particulares con todas las limitaciones, sino trabajar tendiendo a abolirlos en interés de una unidad más grande. “Para lograr un enfoque espiritual en el arte, se necesita apoyarse lo menos posible en la realidad, porque la realidad se opone a lo espiritual”. Para el pintor neerlandés el arte era el camino para el ser espiritual.
En 1919 volvería a París y en 1930 entraría en el Cercle et carré y un años después en Abstracción creación. En ese periodo conoció la música jazz que trajeron los soldados que habían participado en la guerra. Eran momentos de profunda transformación entre las dos guerras, Mondrian dejó escrito en 1931 que, el arte para ser realmente nuevo debe sufrir una transformación positiva en la representación de aquello que es esencial en la manifestación artística, es decir una transformación positiva en la representación de la expresión puramente plástica, ausente de la representación figurativa y que viene creada de las relaciones de la línea y del color y de los planos que ellos comportan.
Después de la invasión de los nazis de los Países Bajos y la caída de París y después dedos años en Londres es cuando se traslada a Nueva York. En América, se consolida en el neoplasticismo, en la expresión de lo universal, llega a crear algo nuevo, personal que llegaría a ser un pintor icónico en el siglo XX ejerciendo una influencia extraordinaria en la estética contemporánea. Unas obras rítmicas e inspiradas en escenas musicales. Su obra va dando paso a un mayor dinamismo influenciado por el clima festivo americano y de los ritmos de la música jazz llena los cuadros de líneas de colores (rojo amarillo y azul, los neutros) que se entrecruzan siguiendo el ritmo de la música como en el famoso cuadro de 1944 Broadway Boogie Woogie.
Cuadros más vívidos y con concomitancias con el mundo del jazz. En la última sala de la exposición se puede ver una proyección en lal que al son de la música jazz afroamericana van apareciendo distintos cuadros de colores primarios que van conformando los lienzos del pintor en su etapa del neoplasticismo. En las primeras salas veíamos obras que representaban unas vacas que pastoreaban en el campo holandés para terminar al son de jazz en NYC.
Influyó mucho en el mundo de la decoración siendo esto precisamente una paradoja dado que Mondrian pensaba que, así como el arte abstracto puro no es dogmático tampoco lo era decorativo. Ya en los años treinta Lola Prusac para Hermès diseñó bolsos y equipajes inspirados en su obra. Ella era amiga personal de Mondrian y utilizaría la moda como vehículo para democratizar el arte en la cultura popular. No podemos dejar de recordar a Yves Saint Laurent que copiaría a Prusac y diseñaría loss vestidos cocktail inspirándose en los cuadros de la etapa del neoplasticismo.
Mondrian moriría en Nueva York en 1944 dejando sin terminar la obra Victory Boogie Boggie, siempre más allá en su propio camino. Un pintor que pensaba con los ojos. La muestra del MUDEC trata pues de la vida de una búsqueda, y pone en muestra que detrás de la aprente simplicidad de sus obras de la etapa neoplasticista, que pueden llegar a creer o dar la falsa ilusión de que hasta un niño lo haría de la misma manera, hay una constante búsqueda. Son trabajos originales y difíciles de reproducir con el mismo efecto del que él fue capaz de obtener y que le hcieron mundialmente conocido.
Una exposición interesantísima en la que se va recorriendo con la mirada los estilos y técnicas con las experimentó a lo largo de toda su vida a través de las obras del pintor. Se descubre al público que la innovación parte de la tradición, que lo nuevo ahonda sus raíces en el pasado. Al salir del museo el espectador puede llegar a sentir que ha visitado una muestra que ha sido capaz de unir lo sensible y lo intelectual, y con una paz interior, y. tal vez. pensando que merece la pena verla de nuevo.

INFO
MUDEC
Museo delle Culture
Via Tortona 56, Milano
Infoline e prevendita:
0254917 (lun-ven 9.00 – 18.00)
Singoli: helpdesk@ticket24ore.it
Gruppi e scuole: ufficiogruppi@ticket24ore.it