
VILLAESCUSA. EL TIEMPO SE DETIENE

ENRAIZADO EN JEREZ DE LA FRONTERA DONDE PINTA LO QUE LE RODEA: SUS VIVENCIAS, SU ENTORNO, SU LUZ, SU FAMILIA. CUADROS QUE NOS HABLAN DE LOS PATIOS INTERIORES DE LAS CASAS DE ANDALUCÍA, DONDE SE HA DETENIDO EL TIEMPO Y UNA ABUELA TARAREA UNA CANCIÓN MIENTRAS CUIDA SUS PLANTAS.
Myriam Lafuente Soler, giornalista spagnola (di Alicante), collabora per Agenda Viaggi scrivendo in spagnolo e inglese. Ci racconterà con i suoi articoli, le sue emozioni e i suoi punti vista. Una scelta inedita, che aggiunge un tocco internazionale al nostro magazine online.

Milan, Italy.
VILLAESCUSA, PINTOR REALISTA
Gran admirador del pintor Antonio López, uno de los pintores españoles vivos más conocidos y cotizados. “Antonio López es un referente de la pintura figurativa contemporánea. Tuve la suerte de hacer el primer curso de Realismo y Figuración para pintores en Olula del Río en mayo del 2012 con los profesores Antonio López y Andrés García Ibáñez organizado por la Fundación Casa Ibáñez“, comenta el pintor, quien tuvo el honor de recibir lecciones del pintor manchego y empaparse de su buen hacer, sencillez y genialidad. La sensación que le produjo el contacto con el maestro López fue la de un señor manchego, de pocas palabras, y con mucha seguridad al hablar de pintura y pintores, alguien a quien daba gusto escuchar, pues con él -comenta- se aprendía. Transmitía seguridad y conocimiento. Allí se encontraba también Mary (María Moreno), esposa de Antonio López, fallecida en el 2020, la cual era también artista.
Villaescusa, como pintor, observa atentamente la realidad para poder plasmarla en el lienzo. Es un pintor de pocas palabras, y muy preciso al definir las situaciones, se podría decir que no se anda con rodeos. Le gustan las cosas claras, y llamar a las cosas por su nombre. Podría decir que pinta como habla: las cosas son tal cual son. Sus cuadros parecen a veces producir la sensación de que son más reales que la propia realidad: “Me considero un pintor realista. Pienso que dentro de la figuración hay mucho de abstracción”. Fermín Villaescusa pinta con realismo pero no le gusta nada la palabra hiperrealista, donde no quiere ser encasillado. Es, el hiperrealismo, un movimiento con el que no se identifica y considera además que, Antonio López tampoco lo es: “El movimiento hiperrealista surgió en los años sesenta y es casi una reproducción fiel de una fotografía. Yo, cuando pinto un cuadro figurativo realista, no pretendo que sea una copia, pretendo que sea real. Cuando vi en Madrid las obras de Antonio López no me pareció un pintor hiperrealista, es decir que hiciera la copia de una fotografía. Me pareció más bien que el pintor busca en sus obras lo que yo intento hacer, es decir, que con su desarrollo plástico intentar pintar lo que ve. Aunque la gente diga que Antonio López sea hiperrealista para mí no lo es, sino que lo que hace es más un impresionismo detallado, incluso con partes abstractas A través de la pintura, plasmo lo que tengo delante”.
El pintor andaluz no pinta mirando fotografías, ni pretende reproducir algo como si é fuera una máquina de hacer fotos. El es un pintor, hace pintura, aunque señala: “La fotografía es una gran ayuda para el pintor figurativo, pero no es un fin”. Yo no intento copiar fielmente una fotografía”. (Algo que sí hacen los hiperrealistas).
PINTAR EL ENTORNO INMEDIATO
Es un pintor pegado a la tierra, su realidad más inmediata. Cuando él trabaja las prisas desaparecen y ni los relojes le señalan la hora: “Pinto mis vivencias, mi entorno, mi luz, mi familia… lo que me rodea. Me he criado en la cultura romano árabe en Andalucía donde los patios interiores desempeñan un papel muy importante, dan frescor y luz a las casas. Estoy rodeado de patios, por desgracia cada vez quedan menos. Patios interiores donde las abuelas cuidan de sus plantas. Sobre todo en Andalucía occidental, donde he crecido, en Jerez de la Frontera. Pinto vivencias personales a pocos metros de mi casa”.
Un pintor realista se basa en la observación atenta de la realidad: “Pinto las plantas observando mucho, observo el color, el mismo movimiento y forma que tiene. Yo tengo plantas de interior dentro de mi patio. La pintura figurativa realista es fruto de la observación. Después es como tu pones la pintura, hay quien lo hace más detallada y cuidadosa y quien la pincelada más largo, pone la pintura de otra forma”. Las plantas que pinta Villaescusa tienen carácter, están vivas, se siente el frescor y como les toca la luz… Y todo esto se logra por la sensibilidad del artista jerezano posee. El dominio de la técnica que posee el pintor andaluz es también extraordinario, es un don innato (siempre le gustó dibujar), que ha ido perfeccionando y cultivando con el tiempo. Es un pintor autodidacta.
Los patios desempeñan un papel importante dando frescor y luz a las casas. Por desgracia cada vez quedan menos, señala el pintor. Observar, observar y observar. Es la clave para un pintor realista. Villaescusa admira a Sorolla, pintor
de la luz. También él es un maestro del tratamiento de la luz.
REFERENTES PICTÓRICOS
Respecto a sus gustos personales antes tenía sus tendencias ahora se queda con obras concretas de unos pintores determinados. “Me gustan muchos… me quedo con determinadas obras. Soy un admirador de la pintura del XIX. Me encanta Sorolla, Fortuny, Madrazo, García Ramos. No puedo dejar atrás la pintura del siglo XVII que son un referente para cualquier pintor: Velázquez, Rivera, Murillo o Goya. Del pintor aragonés le gusta la Familia de Carlos IV y las pinturas negras. Elward Hopper, Vermeer de Delf, John Singer Sargent, David Hockney… son también algunos de sus referentes fuera de España.
Villaescusa pinta esos patios interiores de Jerez de la Frontera. No hay tiempo, solo luz, frescor Las paredes blancas de los patios reflejan mejor la luz recibida. Los patios son reminiscencias de la cultura árabe, que vive hacia dentro protegiéndose del calor.
LO REAL NO ES LO VIRTUAL
Un pintor con raíces profundas, muy realista. Hace una crítica profunda al mundo actual, ese vivir experiencias que no son reales: “Nos estamos acostumbrando a ver galerías virtuales que no son reales, el móvil da una luz extra, la gente retoca las fotos. Vemos galerías virtuales que no son fiel a la obra en vivo. Hay que hablar con la obra delante, tener sensación de realidad, pero realidad de verdad, no fotográfica. La realidad de la pantalla no es real, sí lo es contemplar la obra en vivo. Hay que hablar teniendo la obra delante”.
ANTONIO MACHADO
¿Tu verdad? No, la verdad, y ven conmigo a buscarla. la tuya, guárdatela”, dice un poema del poeta Antonio Machado, como también: “Se miente más de la cuenta por falta de fantasía: también la verdad se inventa”. Unos versos del poeta admirado por Villaescusa que bien refleja el aliento del pintor jerezano al ponerse a pintar. Poeta puro y transparente, quien transcurrió su infancia en Sevilla, y siempre la llevaba dentro “estos días azules y ese sol de la infancia”. La arquitectura interna de la casa donde nació, el Palacio de las Dueñas las azoteas y patios han dejado huella en su espíritu. Es fácil intuir que Villaescusa ame este poeta de la generación del 98.