EL ARTE QUE VIAJA, UNA IDEA INTERESANTE

CUANDO QUIEN VIAJA ES EL ARTE

Scritto da Myriam Lafuente Soler on . Postato in Appuntamenti, Cultura

LA BELLEZA, TAN ANTIGUA Y TAN NUEVA

La Anunciación de Tiziano. Ph. Simona Rascioni

SYLVAIN BELLENGER, DIRECTOR DEL MUSEO CAPODIMONTE DE NÁPOLES : “EL ARTE ES UNA EXPRESIÓN INTELECTUAL Y DEBE VIAJAR COMO LO HACEN LAS PERSONAS O LAS IDEAS”. LA ANUNCIACIÓN DE TIZIANO VIAJÓ DE NÁPOLES A MILÁN.

Myriam Lafuente Soler, giornalista spagnola (di Alicante), collabora per Agenda Viaggi scrivendo in spagnolo e inglese. Ci racconterà con i suoi articoli, le sue emozioni e i suoi punti vista. Una scelta inedita, che aggiunge un tocco internazionale al nostro magazine online.

Napoles, Italy.

BELLENGER, UN DIRECTOR CON MENTALIDAD GLOBAL

Sylvain Bellenger es normando estudió en París, la Sorbona y después se especializó en Historia del Arte en la prestigiosa Ècole du Louvre de la Sorbonne. No se siente extranjero en Italia y tampoco cuando vivió en USA porque piensa que, en un mundo globalizado el concepto de extranjero es difícil de definir. De esa manera quiere despejar las críticas de que al frente de un museo italiano se sitúe un francés. Bellenger bromeando, comenta que los normandos estuvieron en Nápoles antes que los italianos. Después de algunos años en los Estados Unidos trae a Capodimonte una visión más práctica a un museo que se sitúa entre los mejores a nivel mundial.

Dirigir el Museo de Capodimonte de Nápoles, uno de los museos más importantes de Italia y del mundo es, para su director Sylvain Bellenger, el reto más importante de su carrera. Es un sueño para él pues se trata de la galería de arte más grande de Italia del sur y cuenta con más de 160 habitaciones repartidas en tres pisos donde forman parte las mejores obras de arte del renacimiento italiano. En el museo hay obras de Raffaello, Tiziano, Parmigianino, Bruegel, El Greco, Ribera, Masaccio y Luca Giordano.

El patrimonio artístico del sur de Italia es todavía un tesoro escondido, según el Bellenger, y en concreto Nápoles, como centro artístico cultural de Italia y de Europa. Nápoles es, para el director Bellenger, uno de los puertos más importantes del mundo junto a Génova, Marsella, Lisboa, Singapur, Estocolmo o Shanghai. Por su trayectoria vital el director posee una visión global del mundo que está dando a Capodimonte.

El museo está rodeado de un bosque natural con más de 134 hectáreas y 400 diversas especies vegetales. Bellenger vive allí, in situ pues quiere hacer parte del mundo de Capodimonte completamente. Un director excepcional, con ideas frescas, con mentalidad global, con experiencia internacional, una sensibilidad exquisita y un bagaje intelectual de alto nivel.

Con esta visión generosa del mundo, el director francés quiere sacudir la monotonía en la que se puede instalar un museo y desea ofrecer la posibilidad del placer del arte, de alcanzar otros públicos, esa es la idea que subyace en el viaje que la La Anunciación de Tiziano ha realizado Milán, donde ha permanecido tres meses en el museo diocesano para celebrar su vigesimo aniversario. Ahora la obra vuelve a Nápoles, al museo donde pertenece. “El arte es una expresión intelectual y como tal debe viajar así como lo hacen las ideas y las personas”, comentó el director francés cuando se privó por unos meses de ese capolavoro para dejarlo en prestito. En este caso es el arte quien viaja para conocer otros espectadores.

TIZIANO: EL COLOR PREVALECE AL DIBUJO. LA ESCUELA VENECIANA

El pintor véneto del Alto Renacimiento, Tiziano Vecellio (1490-1576) uno de los mayores exponentes de la Escuela Veneciana. La obra La Anunciación pertenece al Museo Real Bosco di Capodimonte en Nápoles. Es una tela de grandes dimensiones 280×193. Tiziano, pintor de la República de Venecia, la Serenissima, e gozó de una independencia hasta la invasión napoleónica. Era un estado poderoso que dominaba el mediterraneo oriental hasta Chipre, un imperio comercial. Ciudad opulenta y bella, donde Tiziano se formó como artista en la bottega de Bellini, cuando éste murió fue alumno de Giorgione. Una amplia y variada producción que le llevaron pronto a la fama. A los treinta años ya era famoso pues poseía un fuerte instinto comercial y le hacían encargos (Los Gonzaga de Mantua y Este de Ferrara, familias ricas esenciales para el desarrollo del arte). Llegaría a ser el pintor del hombre más poderoso del momento, Carlos V, y eso le llevo a ser el artista más solicitado del momento (también lo sería de Felipe II). Transformó el arte europeo y fue la estrella más brillante del mundo artístico de la Venecia del siglo XVI. El primer artista internacional de la Historia.

La Anunciación la realizó e torno a 1558 para la familia Pinelli, banqueros y comerciantes de origen genovés trasferidos a Nápoles para su capilla dedicada a Cosimo Pinelli a la Virgen della Annunciata que se encontraba en el crucero de la iglesia napoletana di San Domenico, la única al mundo a haber conservado juntos pinturas de Raffaello, Tiziano y Caravaggio. Por siglos, se pensó que esta obra fuera una copia del pintor napolitano Luca Giordano porque no existían vínculos entre el pintor véneto y Nápoles hasta que el 1925 el estudiosos Roberto Longhi viendo la tela en la iglesia de San Domenico afirmó que era auténtico. La obra pertenece a la etapa madura del artista y es un raro caso de pintura véneta en Nápoles del siglo XVI. Una perfecta composición y un color brillante veneciano que Tiziano domina a la perfección; un precioso sentido del equilibrio y del color.

Tiziano es una figura claves del renacimiento italiano. La escuela veneciana, a la que pertenece Tiziano, está basada en el color vívido y los efectos luminosos y no en el dibujo como la escuela florentina y romana. Toda esa gloria de luces de La Anunciación de Tiziano es esplendorosa, se aplican blancos amarillos directamente en una pincelada suelta. Usa por lo tanto el color, mancha y luz frente al predominio del dibujo; emplea la pincelada suelta que a veces pueda parecer inconclusa. Esa era pues la sensación que las obras de Miguel Ángel le daban las de Tiziano, que estaban incompletas.

Miramos atentamente el cuadro que reina en la sala. Una columna inmensa que recuerda más a un templo que al hogar donde se supone se encontraba la Virgen recogida en oración, Reina el silencio, que es la lección más grande. La obra tiene el poder fortísimo de hacernos espectadores de una escena para la que no somos dignos. Pero ahí estamos frente a la apabullante majestuosidad del ángel y la humildad de quien va a ser la madre de Dios. Tiziano es un genio en la captura del instante, un maestro del color y su equilibrio y sentido gráfico de la luminosidad. El color rojo de la Virgen es del llamado “rojo Tiziano”, un rojo con una tonalidad marrón, anaranjada. Un color que el pintor véneto también usaba para pintar mujeres sensuales (cortesanas) como en Amor sacro y amor profano, Salomé con la cabeza de Juan el Bautista.

La mano derecha del ángel parece querer tranquilizarla mientras los pequeños ángeles en el cielo se agitan de alegría. La luz blanca en alto que baja del cielo para iluminar a la Virgen María. El efecto de color es sencillamente arrebatador. Se abre las columna, con una luz resplandeciente que baja del alto, momento sublime, la encarnación del hijo de Dios. O el minuto antes, cuando libremente María, recogida en oración que queda turbada ante el anuncio de un ángel majestuoso. Le dicen que va a ser madre, a ella “que no conoce varón”.

Contraste de azul, amarillos… efectos luminosos interesantes en particular en los brillantes vestidos del ángel en rosa damasco y plata. La Virgen quedará concebida del Espíritu santo y el ángel, en observación, pasmado ante el acontecimiento. Para darle importancia hay un rompimiento glorioso de ángeles que suben y bajan revoloteando realizado por el maestro colorista, como una fiesta. Se oye el batir de las alas en el silencio de la sala, cualquier otro sonido nos molestaría en ese momento. Tiziano logra captar e momento de forma sublime.

CONTEMPLAR EL ARTE. UNA FORMA DE ACERCARSE AL MISTERIO

“Trata a la obra de arte como a un príncipe. deja que te hable primero”. Con esta frase de Arthur Schopenhauer nos acercamos a esta maravillosa obra de arte. Delante de ella solamente cabe el silencio, creo que nadie se atrevería a discutir delante de ella o dar gritos. El ángel mensajero de Dios con su imponente actitud no permitiría que se oyera nada más que la voz de la Virgen. Guardamos silencio y nos disponemos a contemplar el cuadro, a dejarnos embriagar por él, sin prisas, y establecemos una conexión, un diálogo interno que podremos tener al salir de la sala también, en el ruido de la calle.

Tiziano fue pionero de la profundidad psicológica. “El pintor siempre debe buscar la esencia de las cosas, representar siempre las características y mociones esenciales de la persona que pinta”. Se trata de una frase muy interesante y que se puede tener en cuenta al observar atentamente esta maravillosa obra. Las emociones del ángel serían la fuerza y determinación al ser portador de un mensaje de parte de Dios, las de la Virgen de una humildad absoluta y sumisión al Señor: “Fiat”. Y con ese de la Virgen que Tiziano pinta tan maravillosamente sencilla, hermosa y humilde, empieza una nueva era de la Historia que perdura hasta hoy y hasta el final de los tiempos. Contemplar este lienzo de tal sublime belleza es interiorizar el mensaje de que Cristo vino al mundo a través de una joven humilde. La llegada de Dios al mundo, su manifestación esperada por tantos siglos.

Y se empieza a rezar mirando al lienzo porque rezar es contemplar. La mirada atenta se pierde en los detalles de la obra de arte y siente una emoción sobrenatural, un “hay algo más” del mundo material. Es lo sobrenatural, que, mirando con atención la obra de arte, te permite sentir siendo la atención la oración espontánea del alma. Con la observación de un cuadro que nos transporta al misterio se activan muchos sentidos, también el oído, especialmente si hay silencio en la sala y solamente hay una obra, la que estamos contemplando. Hay que considerar que esta obra se hizo para estar dentro de una iglesia, un lugar de culto, un lugar de guardar silencio para la disposición de escuchar la voz interior. Ese era su contexto: un cuadro que te invita a contemplar el misterio en el interior de un lugar sagrado.

Una maravilla, una fiesta para los ojos, un regalo para el alma. “Más que una anunciación esta obra de Tiziano es una iluminación, una vibrante búsqueda de la luz. El arte te permite ir más allá del mundo de las palabras pues la pintura tiene esa capacidad, la de revelar mundos que se escapan a las palabras”, señaló Bellenger. El pintor véneto logra con la iluminación que el espectador quede deslumbrado.

La via de las expresiones artísticas, es una ayuda para encontrarnos con Dios. Ante un cuadro como este se siente una íntima emoción, algo que “habla” y capaz de tocar el corazón y de elevar el ánimo. “El arte es capaz de expresar y hacer visible la necesidad del hombre de ir más allá de lo que se ve, manifiesta la sed y la búsqueda de lo infinito. Incluso es como una puerta abierta hacia el infinito, hacia una belleza y una verdad que van más allá de lo cotidiano. Y una obra de arte puede abrir los ojos de la mente y del corazón empujándolo hacia lo alto. Hay expresiones artísticas que son verdaderos caminos hacia Dios, la Belleza suprema, que incluso son una ayuda para para crecer en relación con Él, en la oración. Se trata de obras que nacen de la fe y que la expresan”, son las hermosas palabras del Papa emérito Benedicto XVI que encuentro adecuadas para poner el punto final. Cuando se apaguen las luces de la sala al caer la noche La Anunciación de Tiziano resplandecerá del mismo modo en la oscuridad, pues tiene luz propia. No necesita pues de luz artificial para ser contemplado si se hace con ojos de la fe.

INFO

https://capodimonte.cultura.gov.it
mu-cap@beniculturali.it

Myriam Lafuente Soler

Myriam nace en Alicante, España en 1973. Desde pequeña siente una fuerte inclinación por la escritura. Se hace periodista y cumple su sueño junto con el de ser mamá de 3 hijos estupendos. Ha vivido en Singapur, experencia que la marca profundamente a la hora de ver el mundo. Vive en Italia desde hace 10 años. Le encanta la naturaleza y contemplar las nubes.